Maca, un día muy especial y ¿Campanadas de boda?

Buenos días bonit@s!!!! YA ES JUEVES!!!! lo cual significa que el fin de semana está a la vuelta de la esquina y vais a disfrutar de un merecido descanso. Para que la espera se os haga más llevadera os he preparado un post de lo más divertido, donde os cuento que en Valencia van a sonar «Campanadas de boda» y no es que yo me case, ni mucho menos, los que se casan son Violeta y Vicram Sody. Vosotros os preguntaréis, y con razón,  que quienes son estos, pues dejadme que empiece por el principio de los tiempos, es decir, ayer por la mañana y entenderéis de que va la cosa.

Como a veces asisto a las ruedas de prensa que se celebran en la ciudad, la semana pasada me llegó un correo del Teatro Olympia donde citaban a la prensa a la celebración de una boda. El acto tendría lugar el día 26 de marzo a las 13.00 horas y el emplazamiento elegido sería la Plaza de la Reina. Así que ayer mismo allí esta yo, preparada para hacer fotos y disfrutar del festín !y es que menuda nos tenían preparada!. !champagne, trufas, tarta y… bueno para que contarlo !mirad, mirad!

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El caso es que minutos después de estar disfrutando de estos manjares, apareció una limusina de la que no paraban de salir novios y novias !viva el amor! y es que las bodas es lo que tienen que todo tiene que ser a lo grande o no nos parece perfecta. Algo así es lo que vienen a contarlos el conocido grupo teatral «La Cubana». «Campanadas de boda» , que es así como se llama la obra, es una «parodia de la gran parodia» que todos hacemos al casarnos, al menos así lo cuentan ellos.

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Estoy segura que si vamos a una boda y observamos a los novios, a los invitados, a los de la orquesta y a todo bicho viviente nos reiríamos bien a gusto. Que si Teresa y María llevan vestidos parecidos !qué horror repetir vestido en una boda!, que si la hermana de la novia va incluso más guapa que ella ¿Pero cómo se atreve?. Que si los novios en vez de bailar un vals les da por hacer una coreografía de Grease !escándalo entre la «juventud»!. Que si vaya comida nos han sacado, que a mí esto no me gusta y encima que les doy un sobre con 50 euros para que se compren la lavadora que necesitan me sirven esta porquería !donde esté una buena paella que se quité el caviar y las tonterías estas!. Que cuando nos ponen a Manolo Escobar y al Fary que queremos salir a bailar. Que a mi hijo le han dado el detallito roto ¿Mariiiiii no tendrás otro?…. Es el mejor día para abrir bien los ojos  y darte cuenta de que las familias de los novios, realmente, no se llevan tan bien como aparentan, que las amigas de la  madre de la novia han sido invitadas por obligación porque la hija, en el fondo, no quería… y así un sin fin de situaciones muy pero que muy divertidas que pasan en la vida real. Así que para reírnos un poco más del tema tenemos que ir a ver «Campanadas de boda».

Estarán en el teatro Olympia de Valencia, del 24 de abril al 1 de junio y aquí os dejo el enlace para que podáis ir comprando las entradas ya mismito.

http://www.teatro-olympia.com/portfolio/campanadas-de-boda/

Y después de hablar de boda como que a una le entra la morriña de casarse pero buff me queda tan lejos. En fin a lo que vamos que os tengo que contar muuuuuchassss cosas, así que voy a empezar. Después de la noche tan perfecta, bonita, ñona o como la queráis ver, me desperté. Eran las diez de la mañana y me sentía como nueva, relajada, despejada, mis pensamientos negativos seguían guardados en el cajón !ahí sí que estaban bien!. Nada más abrir los ojos me di cuenta de que estaba sola ¿habría sido un sueño? pensé, pero mis dudas se disiparon en un segundo. Roberto estaba apoyado en el marco de la puerta, me miraba con unos ojos de deseo que a una le quitan el hipo y para más inri solo llevaba unos calzoncillos de lo más ajustaditos que dejaban al descubierto el cuerpazo que tenía… ¿de donde había sacado esos calzoncillos? ¿Se había ido a casa? bueno daba igual, estaba de toma pan y moja y eso era lo que me importaba en ese momento. – Buenos días preciosa. – Buenos días, dije haciéndome la remolona. – Me parece que ha dormido como nunca ¿me equivoco?. – Bueno, bueno tampoco se pase, digamos que he dormido bien, dije poniendo ojitos de malota.

Roberto no se pudo resistir y se abalanzó sobre mí, nos volvimos a besar como si no hubiera un mañana y volvimos a hacer el amor !otra vez! ¿Qué me estaba pasando? ¿y mi vaginismo? ¿y mis pensamientos? !dios este hombre estaba provocando un efecto en mí de lo más agradable!. Tras un buen rato en la cama me dijo  – Bueno señorita habrá que levantarse y desayunar, esta noche trabajo y necesito coger fuerzas. Vaya, esta noche le tocaba bailar delante de cientos de tías desesperadas !qué guay! (ironía modo on). – ¿Un miércoles trabajando? le dije sentándome sobre la cama. – Sí, una fiesta de cumpleaños. – ¿Habrán jovencitas?.- Si con jovencitas te refieres a mujeres entre 50 y 55 años, sí las habrá. dijo riéndose a carcajadas. Después me dio una palmadita en el culete y me dijo. – Señorita usted no tiene nada de lo que preocuparse, es un trabajo como otro cualquiera y no suelo ligar con las asistentes. – ¿A no? entonces… ¿yo que era?, le dije picarona. – Le he dicho que no suelo, alguna que otra cae. – !Oye! le dije mientras le daba con el cojín en toda la cara. Reía a carcajada limpia, estaba !tan guapo! no quería que ese momento terminara nunca….

Después de pasar un rato haciéndonos monadas varias en la cama, se levantó y me dijo. – Ven aquí nena que vas a ver lo que es un espectáculo privado de lo míos y solo para ti. Abrí tanto los ojos y la boca que me dijo. -Tranquila que no te voy a hacer ninguna guarrada…. me levanté de la cama y al ir al salón me di cuenta de que había una silla en medio, solo para mí… aquella idea me encantaba. Puso una canción a todo volumen, concretamente una que me encanta «Timber» de Pitbull y Kesha, y empezó a bailarme. !Dios santo como se movía! ¿De dónde había salido este hombre?, me hizo un baile tan sensual que yo ya no sabía ni para donde mirar. Estaba encantada pero roja como un tomate, me sentía como si estuviera en una despedida de soltera con el stripper pero sin despelote, aunque si os digo la verdad (sin que se entere nadie) no me hubiera importado.

En fin que después del baile o lo que fuera aquello, sonó otra canción esta vez más romántica y me sacó a bailar. Sonaba «Se fue» en versión salsa cantada por Marc Anthony y Laura Pausini y nos movíamos los dos como si no hubiera un mañana, vuelta por aquí, vuelta por allá, me sorprendí y todo de lo bien que me defendía bailando, pero claro tenía conmigo a un bailarín de excepción que me manejaba a su antojo y yo como que me dejaba. Así pasamos la mañana, entre bailes, risas y besos muchos besos, hasta que llegó la hora en la que tenía que irse a casa. – ¿En serio tienes que irte ahora?. – Tengo que recoger a Nico del colegio Maca, ¿Qué pasa que no has tenido suficiente por hoy?, me dijo en tono picarón mientras me abraza y me miraba a los ojos. – No, quédate porfa. – Me encantaría pero no puedo. Mañana me tienes aquí por la tarde, tengo que aprovechar que aún no has empezado a trabajar. – ¿Por la tarde? Ah vale, el cumpleaños de la cincuentona. – !Oiga! no se meta con la edad de mis clientas, me decía mientras me daba un pequeño beso en la nariz. – Bueno preciosa, voy a vestirme. – ¿Le ayudo? le dije con ojitos picarones. – Pues… le diría que sí pero no se si terminaría de vestirme. – Indirecta pillada, voy a prepararme algo para comer que con tanto baile estoy hambrienta.

En menos de cinco minutos ya estaba vestido, peinado y bien guapo ¿Cómo lo hacía? yo no es que tardara horas en arreglarme, el problema es que casi nunca me veía mona, ays…. – Bueno señorita mañana nos vemos. – Llámame esta noche cuando llegues a casa anda. – ¿A las cinco o seis de la mañana?. – ¿Tanto aguantan las señoras?. -Más que tu y yo juntos de fiesta, y nos reímos a carcajadas. – Pues casi mejor mañana por la mañana. – Vale preciosa, me dio un beso y se fue.

Nada más desaparecer por la puerta sonó mi móvil. – ¿Sí?.- Hola Maca.- ¿Elena?. !Anda si ya me conoces!. – Si buscas a Roberto se acaba de ir. ¿A dormido en tu casa?. – Sí, ¿algún problema? le dije enfadada, la verdad es que empezaba a cansarme y mucho de esta mujer. – No, la verdad es que yo ninguno, supongo que habrá ido a verte para contarte la noticia. – ¿Qué noticia Elena?, me estaba poniendo muy nerviosa. Empezó a reírse al otro lado del teléfono. – Pues que le he pedido otra oportunidad. Después de oír esto me quedé en blanco, no sabía que decir, la mala leche aumentaba en mi por segundos, tenía que colgarle el teléfono, se estaba pasando de la raya, pero en el fondo necesitaba saber la respuesta que le había dado él, así que me lancé. – ¿y él que te ha dicho?.-  Pues… titubeó, que tenía que hablarlo contigo en persona para que no te lo tomaras muy mal. Nos necesitamos Maca y tú estás en medio. !Esto no me podía estar pasando a mí! después de la noche y la mañana tan perfectas, esto no podía ser real. Le colgué el teléfono en sus narices, no aguantaba que me dijera nada más.

Acto seguido llamé a Roberto, estaba asustada por si todo aquello era verdad y lo pagué con él. – ¿Sí?. – ¿Es verdad que ayer viniste a mi casa para contarme que vuelves con Elena?.- ¿Cómo?. – Lo que has oído Roberto ¿Vas a volver con tu ex mujer?. – Maca, tranquilízate por favor. No Roberto, estoy harta. No llevamos juntos ni un mes y esa mujer no me deja en paz y tú no tienes lo que hay que tener…- Maca. – No, Roberto si se te ha pasado por la cabeza volver con ella mientras estabas conmigo no quiero volver a verte, te lo digo muy enserio y colgué.Y  hasta aquí os puedo contar porque acaban de llegar mi hermana, su marido y los peques que tenemos cena familiar. Solo os puedo adelantar que en los siguientes días no supe nada de él…

 Besotes

      Maca

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